La Existencia Bíblica de Pastores

Por David Cox
Contenido

¿Por qué atacan la existencia del pastor?

pastor con ovejas

El pastor es bíblico




El oficio y trabajo del pastor de la iglesia ha sido bajo ataque por mucho tiempo. La razón por esto regresa a simplemente que él es la persona entre las ovejas y la perdición. Él es la persona entre las ovejas y los lobos rapaces. Si el pastor no existe, es incompetente, es cobarde, o es ignorante y tontito, entonces los lobos comen tacos de carnero todos los días (que casi es así por todos modos). El pastor bíblico estorba grandemente los malos de salir con lo suyo. Para estos lobos, o falsos profetas, es de mucha provecho de machucar el concepto de pastor, o de dañar el poder de un pastor de obrar todo lo que puede. Quieren restringir y robar la autoridad y poder con que él defiende el rebaño de Dios. Los motivos aquí son muy obvios. Si se puede quitar de la mente el concepto de pastor, logran mucho en dejar indefenso el rebaño de Dios. Si se puede cambiar del patrón bíblico lo que es el ministerio bíblico del pastor, entonces les ayuda grandemente y aprovecharse del rebaño. Así entramos en el tema de ¿qué es un pastor bíblicamente hablando?

Entonces el argumento que nos proponen es simplemente así, “el oficio y trabajo de un pastor no es bíblico. No debe ser ninguna persona sobre otro entre el pueblo de Dios.” Entonces por decreto de un sabe-lo-todo, el ministerio y existencia de todos los pastores terminó. Entre las iglesias de la Hermandad (Brethren), usan los “hermanos maduros” entre ellos de tomar turnos en predicar. El sistema de iglesias en casa, (estudios en los hogares), como de Watchman Nee, y otros, usa “líderes” o “maestros” pero se divorcian este concepto del pastor que gobierna. Rick Warren usa el concepto de pastor, pero quien que manda y controla el pastor es lo que es de voto popular entre su gente (que muchas han hecho políticas del gobierno de la iglesia igual, todo por voto de popularidad entre miembros de poco compromiso o entrego al Señor). Muchas iglesias usan un ejemplo en su experiencia de un pastor dictador que hizo mucho daño al pueblo de Dios, y con este mal ejemplo, tachan todos los pastores como iguales de mal. Muchas iglesias con pastores ven estos pastores dictadores o de mal ejemplo y deciden de usar alguien como un pastor, pero en su concepto tiene que ser sujeto a los diáconos, o unos ancianos (mesa directiva) en la iglesia quienes manejan todo. Los presbiterianos igualmente dicen que el sistema de gobierno sobre la iglesia no es un pastor, sino es una mesa o comité de ancianos que deciden todo, y ellos eligen un pastor para hacer su voluntad. Los bautistas en general hacen lo mismo pero usan el concepto de diácono en lugar de ancianos.

La lista de corrupciones de la idea y concepto de pastor es larga, y podemos seguir por páginas describiendo esta locura. El punto no es que hay un pastor que ha hecho algo malo. Admitimos que esto es por todos lados. Hasta en el A.T. Dios regañaba a los pastores malos de Israel. Parte de este problema es la falta de enseñanza bíblica de lo que es el ministerio y concepto de pastor. ¿Has ido a un médico o doctor una vez en tu vida para recibir consejos y recetas médicas que luego no te ayudaron sanar? ¿Decides después de esta “mala experiencia” de jamás usar doctores? Es loco ¿no? Si tienes una mala experiencia con un doctor, salte de él y nunca tienes trato con él jamás, y ten mucha precaución en seleccionar a otro doctor. Igual es con pastores e iglesias.




El concepto y oficio de pastor es bíblico.

Empezamos con una pregunta muy fácil de contestar, ¿Es bíblico el concepto de “pastor”? Buscamos la Biblia y encontramos lo siguiente: la palabra “pastor” es usado abundantemente en las Escrituras, tanto el Antiguo Testamento que el Nuevo Testamento. Gén. 4:2; 13:7, 8; 26:20; 29:9; 46:32, 34; Éxo. 2:17, 19; Núm. 14:33; 27:17; 1Sa. 17:34, 40; 21:7; 25:7; 1Re. 22:17; 2Re. 10:12; 2Cr. 18:16; Job 1:16; Sal. 23:1, 2; 28:9; 49:14; 67:4; 78:72; 80:1; 136:16; Cnt. 1:8; Isa. 11:6; 13:14, 20; 31:4; Is 38:12; 40:11; 44:28; 56:11; 57:18; 58:11; 63:11; 63:14; Jer. 2:8; 3:15; 6:3; 10:21; 12:10; 22:22; 23:1, 2, 4; 25:34, 35, 36; 31:10; 33:12; 43:12; 49:19; 50:6, 44; 51:23; Eze. 34:2, 5, 7, 8, 9, 10, 12, 23; 37:24; Ose. 12:12; Amó. 1:1, 2; 3:12; Miq. 5:5; Nah. 3:18; Sof. 2:6; Zac. 10:2, 3; 11:3, 5, 8, 15, 16, 17; 13:7; Mat. 9:36; 25:32; 26:31; Mar. 6:34; 14:27; Luc. 2:8, 15, 18; 2:20; Jn. 10:2, 11, 12, 14, 16; Ef. 4:11; Heb. 13:7, 17; 13:20, 24; 1Ped. 5:4; Apoc. 7:17. Nuestra única conclusión y la repuesta en verdad a nuestra pregunta es que el concepto de pastor es un concepto bíblico.

Ahora, unos que quieren torcer las Escrituras para sus fines nefarios, van a decir, “Sí, el concepto es bíblico. Hubo pastores cuidando sus ovejas por noche cuando los ángeles les aparecieron para anunciar el nacimiento de Jesús. Pero solamente personas quienes cuidan animales. Un pastor sobre la iglesia, el pueblo de Dios, no es bíblico.” Sí es cierto que muchas de estas citas hablan sobre hombres encargados con el cuidado total de ovejas, animales. Desde allí Dios ha tomado el concepto de supervisión, protección, y alimentación para aplicarlo espiritualmente a su pueblo. Pero la palabra “pastor” es también usado de supervisión espiritual.

Sal 23:1 Jehová es mi pastor; nada me faltará. Aquí unos tercos van a contestar que “Sí, hay un pastor espiritual sobre el rebaño de Dios, y esto es Jesucristo. Pero yo no acepto un hermano de ponerse como pastor sobre mi.” Es cierto que Jesús es “el Pastor y Obispo de vuestras almas” (1Ped 2:25). Pero esto ignora que él no es el único pastor, sino el principal pastor. “Cuando aparezca el Príncipe de los pastores1Ped. 5:4. Jesús es el Príncipe de todos los pastores/supervisores de sus rebaños.

Jer 23:2 Por tanto, así ha dicho Jehová Dios de Israel a los pastores que apacientan mi pueblo: Vosotros dispersasteis mis ovejas…. Entonces, por ejemplo, este versículo claramente habla de hombres quienes son pastores sobre “el pueblo de Jehová Dios”.

Otra vez hay argumentos de personas rebeldes con ganas, y nos dicen, “pues sí hubo pastores sobre el pueblo de Israel, pero esto no es impuesto o vigente para la iglesia. Dios no maneja la iglesia hoy en día con pastores.Ef. 4:11 “Y él (Jesucristo) mismo constituyó a unos, apóstoles; a otros, profetas; a otros, evangelistas; a otros, pastores y maestros…” De este punto los argumentos en contra de la existencia de pastores atacan aun más fuerte. Dicen, “pues, sí allí están, pero son los dones dados a la iglesia, pero ya no existen apóstoles, no existen profetas, entonces tampoco existen pastores, solamente ‘maestros’ que no tienen autoridad sobre el pueblo de Dios, nada más enseñan.




El ministerio de Apóstol.

El ministerio de apóstol era principalmente uno de los doce apóstoles (quienes tuvieron el ministerio de verificar la vida, los hechos, y la enseñanza de Jesucristo hasta que el canon fue completo, ve Hechos 1:17, 21-22) que eran personas enviadas a lugares sin el evangelio para evangelizar y empezar iglesias nuevas como Pablo y sus acompañantes hicieron. Tenemos que insistir que Dios ha impuesto un patrón obligatorio para misiones en la vida de los misioneros mencionados y estudiados en el Nuevo Testamento. No hay otro patrón o forma permitida de hacer la obra de misiones. Pero este ministerio de apóstol (que nunca era de dar revelación inspirada ni en regir sobre la iglesia) ya no existe hoy en día. El ministerio de los 12 apóstoles no sigue hoy en día, porque su propósito era de testificar personalmente (testigos “a ojo”) a los eventos en la vida de Jesús, y todos los que se calificaban ya han muerto. Lo que sigue hoy en día es el ministerio de apóstol como los que llamamos “misioneros”. Son los mensajeros de las iglesias para empezar nuevas iglesias. 2Co 8:23 En cuanto a Tito, es mi compañero y colaborador para con vosotros; y en cuanto a nuestros hermanos, son mensajeros (literalmente en el griego, “apóstoles”) de las iglesias, y gloria de Cristo. Pablo, Timoteo, y Tito son ejemplos de los modernos “apóstoles”, quienes son actualmente hoy en día el concepto moderno de misionero. Para no confundirnos con las iglesias quienes usan el concepto “apóstol” como el Católico “arzobispo” (alguien que gobierna sobre muchas iglesias, concepto que no es bíblico), usamos siempre la palabra “misionero” y no “apóstol” para este ministerio bíblico hoy en día.




El ministerio de Profeta.

El ministerio de profeta no ha terminado tampoco. El ministerio de un profeta es alguien que regaña al pueblo de Dios, llamando la atención a su pecado, y la voluntad de Dios que cumple o infringe. Natán regañó al Rey David por su pecado con Betsabé. No tuvo nada de ver en tal caso (y en la mayoría de los casos de profetas actuales) con una revelación de nueva profecía. Este elemento del ministerio del profeta entró muy fuerte cuando Dios preparaban a Israel para reconocer su fallo en obedecer a Dios y seguir con el pacto entre Israel y Dios, y entonces Dios les avisó con amenazas de castigo por su desobediencia. El profeta en sí no inventó el castigo (su profecía) sino fue enviado a Israel de parte de Dios. Aunque hoy en día esta función o elemento en la profecía (de nueva revelación) ha terminado, y la última profecía válida es lo del Apocalipsis, y entonces el ministerio de profeta hoy en día es SOLAMENTE EN EL SENTIDO DE REGAÑAR AL PUEBLO DE DIOS, indicándole que es la voluntad de Dios. Al fin de Apocalipsis, es muy claro que este es el fin de revelación inspirada por Dios, porque dice “Yo testifico a todo aquel que oye las palabras de la profecía de este libro: Si alguno añadiere a estas cosas, Dios traerá sobre él las plagas que están escritas en este libro. Y si alguno quitare de las palabras del libro de esta profecía, Dios quitará su parte del libro de la vida, y de la santa ciudad y de las cosas que están escritas en este libro.” Apoc. 22:18-19. El sentido del Apóstol Juan es muy claro. Este es el fin del libro, y alguien que altera, quita, o añade a este conjunto de libros que conocemos como “la Biblia” tendrá todas las maldiciones de Dios sobre él. Ya no hay más revelaciones o enseñanzas inspiradas aparte de lo que se encuentra allí.

El ministerio de Evangelista.

Actualmente el ministerio de profeta en la Biblia es lo que muchas iglesias usan con el término “evangelista”. A estos, no son evangelistas sino conferencistas, que predican en iglesias para causar avivamientos. Un evangelista bíblico es alguien quien anda en la calle donde viven los inconversos, y les presenta el evangelio.

Pero podemos interpretar este pasaje simplemente sin ninguna necesidad de decir que estos dones han cesado. Los conceptos de “pastor” y “maestro” definitivamente son vigentes para la iglesia hoy en día.

¿Realmente qué es la molestia con el concepto de “pastores”?

Si cortamos por todos los argumentos sobre si es bíblico el ministerio de “pastor” o no, llegamos a la conclusión de que unos han tenido malas experiencias con un pastor, y no les gusta el concepto de “pastor” ahora. Esto es a veces por el mal manejo de su ministerio de tales pastores, y en otras situaciones es simplemente la rebelión de estos miembros de su iglesia que no les gustó el pastor predicando fuertemente en contra de sus pecados. O sea, no se vale de aborrecer a todo doctor porque uno te dio una inyección una vez, y te dolió. Doctores dan inyecciones, y duele cuando hacen esto, pero no se vale a aborrecerles por esto. Es parte de su trabajo, pero no les tachas totalmente porque hicieron su trabajo. Así tenemos que ver el ministerio de pastor.




El ministerio del pastor es bíblico, mandado por Dios.

Cuando estudiamos lo que la Biblia dice sobre el ministerio de “pastores”, encontramos que Dios regañó a los pastores de Israel que mal empleaban su ministerio, y prometió que iba a dar buenos pastores al pueblo de Dios. Jer 3:15 y os daré pastores según mi corazón, que os apacienten con ciencia y con inteligencia. Esta profecía se cumplió en el Nuevo Testamento en Ef. 4:11 Y él mismo constituyó a unos, apóstoles; a otros, profetas; a otros, evangelistas; a otros, pastores y maestros, 12 a fin de perfeccionar a los santos para la obra del ministerio, para la edificación del cuerpo de Cristo,

Entonces, el ministerio de un pastor sobre el pueblo de Dios es bíblico, el mero corazón de Dios. Dios estructuró el pueblo de Dios en el Nuevo Testamento en grupos locales, según el área o ciudad o parte de la ciudad donde hubo cristianos, y sobre cada iglesia local ubicó a alguien de supervisar la obra de Dios en tal grupo quien que se llama “pastor”. De negar que esto es bíblico es de negar lo que enseña la Biblia. Es cierto que hay pocos versículos en el Nuevo Testamento que usa el concepto o palabra “pastor” en este sentido. Pero Ef. 4:11 lo usa exactamente como un ministerio espiritual entre la iglesia, y esto es el cumplimiento de Jer. 3:15, entonces no hay forma de esquivarnos de esta realidad. Nuestra actitud no debe ser de oponer el ministerio de pastores, sino de exigir que nuestros pastores sean bíblicos, obedientes a lo que las Escrituras delinean para ellos.

Siendo muy exacta con el uso de las palabras: anciano, pastor, obispo.

Tito 1:5 Por esta causa te dejé en Creta, para que corrigieses lo deficiente, y establecieses ancianos en cada ciudad, así como yo te mandé; 6 el que fuere irreprensible, marido de una sola mujer, y tenga hijos creyentes que no estén acusados de disolución ni de rebeldía. 7 Porque es necesario que el obispo sea…. La primera cosa que observamos sobre este pasaje es que en la mente de Pablo, el anciano y el obispo parece de ser la misma persona o misma cosa. Son en una forma sinónimos. (anciano = obispo).

1Ped. 5:1 Ruego a los ancianos que están entre vosotros, yo anciano también con ellos, y testigo de los padecimientos de Cristo, que soy también participante de la gloria que será revelada: Apacentad la grey de Dios que está entre vosotros, cuidando de ella, no por fuerza, sino voluntariamente; no por ganancia deshonesta, sino con ánimo pronto; 3 no como teniendo señorío sobre los que están a vuestro cuidado, sino siendo ejemplos de la grey. 4 Y cuando aparezca el Príncipe de los pastores, vosotros recibiréis la corona incorruptible de gloria. Aquí vemos también que los conceptos son en una forma iguales. (anciano = obispo, los dos apacientan la grey de Dios). Pero técnicamente hablando, hay diferencias entre los términos “pastor”, “obispo”, y “anciano”.

Hechos 20:17 Enviando, pues, desde Mileto a Éfeso, hizo llamar a los ancianos de la iglesia. 28 Por tanto, mirad por vosotros, y por todo el rebaño en que el Espíritu Santo os ha puesto por obispos, para apacentar la iglesia del Señor, la cual él ganó por su propia sangre. En este pasaje usa obispos como lo mismo de ancianos, pero asignan el trabajo de apacentar. Concluimos entonces…

Anciano – Un anciano es un líder entre su pueblo (grupo de personas) en que los demás ven a esta persona con sabiduría, o fuerza moral para guiar el grupo, o a lo menos para aconsejar bien el grupo. En este punto, no habla tanto de actualmente administrar a otros, sino la capacidad de hacerlo. Habla de su carácter moral,  fuerza social, y su poder para afectar espiritualmente a otros, aunque ejerce tal capacidad o no. Uno es anciano por lo que es espiritualmente ni modo si hace algo oficialmente o no en la iglesia.

Obispo – Un obispo es literalmente un supervisor. Es una persona que tiene la carga de otras personas, empresas, o en una forma u otra de supervisar a algo o personas. Aquí hablamos del oficio realmente. Entonces no existe un obispo sin rebaño. La condición para ser obispo es que tiene rebaño. Un pastor de animales no es pastor si no tiene nada a su cargo. Tiene la capacidad, pero no desempeña la vocación actualmente hasta que tiene un cargo, un rebaño.




Pastor – Técnicamente la palabra es poca veces usada en el esta forma. La idea es de actualmente cuidar a otros, o alimentar a otros. Aunque la pastor es usada pocas veces en su sentido espiritual, la forma verbal, apacentar, es usada más, y particularmente en pasajes estratégicos.

Resumen de las diferencias – Un anciano es alguien que es anciano por la calidad de carácter moral que tiene, y la fuerza de carácter que tiene. Otros ven a este, y le estiman a ser “un líder” entre ellos. Este es el tipo que escogen para actuar, para ser líder, etc. La palabra “anciano” no toca que si está ejerciendo este liderazgo o no, solamente si tiene la habilidad de hacerlo. Si esta persona tiene un cargo en una iglesia, es un anciano, y si no, queda anciano por su calidad de vida. Un obispo es una posición actual en la iglesia local, actuando en el gobierno de la iglesia en la capacidad de supervisión, o de gobernar la iglesia. Cuando un obispo sale de sus cargos sobre la iglesia, deja de ser obispo. Esta palabra habla más bien de la posición actual de administrar y supervisar la grey de Dios. Pastor es una palabra en que refiere a la actividad de gobernar y apacentar. Mientras “obispo” habla de la posición o puesto de supervisión, “pastor” habla más bien de la actividad de cuidar. La persona que cuida la iglesia es mejor referido como “obispo” quien que pastorea. La actividad es de alimentar (la forma verbal de “pastor”).

Queja: “No hay nadie encargado sobre la iglesia.”

He oído por muchos años argumentos basados en abusos por lobos rapaces en disfraza de pastor, y la conclusión de muchos de estas personas es que no es correcto que ningún hermano presume de tomar una posición de autoridad sobre otras personas. Hay denominaciones como la Hermandad (the Brethren), Mennonitas, etc. quienes se basen su distintivo sobre esta presunción. En estudios futuros, vamos a estudiar el concepto de “pastor” (RA’AH) en el Antiguo Testamento, que es alguien que hace decisiones ejecutivas para el pueblo de Dios. Es muy claro que Dios ha impuesto hermanos para gobernar la iglesia, y estos  mismos son los que enseñan y predican. Los trabajos a fuerza van mano en mano. Vemos que el concepto de pastor, obispo, y anciano son casi sinónimos.

Romanos 12:8… el que preside [4291 proisthmi], con solicitud (rapidez, celosamente);

1° Timoteo 5:17 Los ancianos que gobiernan [4291 proisthmi] bien, sean tenidos por dignos de doble honor, mayormente los que trabajan en predicar y enseñar.

Hebreos 13:7 Acordaos de vuestros pastores [4291 proisthmi], que os hablaron la palabra de Dios; considerad cuál haya sido el resultado de su conducta, e imitad su fe.

Hebreos 13:17 Obedeced a vuestros pastores [4291 proisthmi], y sujetaos a ellos; porque ellos velan por vuestras almas, como quienes han de dar cuenta; para que lo hagan con alegría, y no quejándose, porque esto no os es provechoso.

Cuando escuchas a personas que dicen que todos somos iguales en la iglesia, y que ellos no aceptan a nada como un líder en la iglesia, nadie en una posición de autoridad, o nadie que dirija la iglesia, ya enfrentarles con estos versículos. Su problema es rebelión en contra de Dios. Claramente hay personas quienes presiden y gobiernan la iglesia de Dios. Los rebeldes en contra de Dios nunca van a estar de acuerdo con los mandamientos de Dios, pero no dejas que estos presumen de ser bíblicos porque no los son.




La evidencia para el puesto de supervisión.

En 1Timoteo 3, Pablo escribió sobre los requisitos del “obispo”. Pablo establece en este pasaje requisitos para un obispo, hablando del obispado (la oficina formal de supervisión, y el obispo es la persona que ocupa esta posición). Uno de los requisitos en este pasaje es “que gobierne bien su casa…” (3:4). “Gobierne” en griego es proístemi “de G4253 y G2476; estar delante, i.e. (en rango) presidir, o (por implicación) practicar:- gobernar, ocuparse, presidir.” (Strongs) La idea es de pararse enfrente de un grupo de personas como su jefe, su representante, o el líder de ellos. La razón porque tiene que gobernar bien su casa, porque como padre que ordena en su propia familia, el pastor gobierna la iglesia de Dios. “(Pues el que no sabe gobernar su propia casa, ¿cómo cuidará de la iglesia de Dios?)” 1Tim. 3:4). Obviamente Pablo hace el paralelo entre un padre que ordena, administra, y manda en su propia casa con su propia familia como el trabajo de obispo en la iglesia. El cambio de gobernar “proístemi” a “epimeléomai” habla de la misma responsabilidad pero en diferentes términos. epimeléomai – “voz media de G1909 y lo mismo que G3199; cuidar de (fís. o de otra manera):- cuidar.” (Strongs) Este verbo es una combinación de la preposición epi (de intensificar la acción del verbo), y melo, G3199, de interesarse en algo, de importar el bienestar de otro, de cuidar a otro.

Además un poco más adelante en 1Timoteo (1Tim. 5:17), Pablo dice, “Los ancianos que gobiernan bien, sean tenidos por dignos de doble honor, mayormente los que trabajan en predicar y enseñar”. Obviamente hay alguien en la iglesia quien “gobierna” y esta persona tiene la calidad de ser un anciano, y su trabajo es de predicar y enseñar. De negar esta verdad es de negar lo que es obvio en la Biblia.

Heb 13:7 Acordaos de vuestros pastores, que os hablaron la palabra de Dios; considerad cuál haya sido el resultado de su conducta, e imitad su fe.

Heb 13:17 Obedeced a vuestros pastores, y sujetaos a ellos; porque ellos velan por vuestras almas, como quienes han de dar cuenta; para que lo hagan con alegría, y no quejándose, porque esto no os es provechoso.

En unos argumentos, personas astutas han hecho la observación que estos dos versículos no utilizan la palabra “pastor” actualmente (poimén G4166, que es similar a las palabras G4165 apacentar, y G4167 rebaño), sino la palabra jeguéomai G2233. Esto es cierto, pero apoya la evidencia del puesto de supervisión, no es evidencia en contra de ello. Regresamos a nuestras definiciones de palabras, y la palabra “pastor” habla de apacentar más que supervisión (obispo), aunque incluye los dos. Existe en la iglesia, en el plan de Dios, una posición de autoridad en la iglesia, quien es el obispo, o el pastor, o el anciano de la iglesia quien tiene la autoridad de Dios en tal iglesia. El concepto de jeguéomai G2233 es de dirigir, de comandar o mandar, y es usado para estimar o considerar (otros toman a esta persona como quien dirige las cosas). Imagínense si no hay quien que dirige los himnos, y unos cantan una cosa mientras otros a otra. Confusión y caos es lo que salen. Alguien nos dirige para que haya orden y tranquilidad. Hablamos sobre liderazgo (“guiador”), y este concepto es la persona quien que es estimado de ser el jefe, gobernador. Es usado en Mat. 2:6 para Jesús quien es el “guiador” que “apacentará a mi pueblo Israel.” En Hechos 7:10 es usado para José quien era “gobernador sobre Egipto y sobre toda su casa (del Faraón)”. Es traducido “el que dirige” en Lucas 22:26. Pablo es designado con esta palabra “porque éste era el que llevaba la palabra” (Hechos 14:12). Los apóstoles eligieron a Judas y Silas de acompañar a Pablo y Bernabé para anunciar la disposición de la iglesia en Jerusalén (que hubo unos andando diciendo que los apóstoles enseñaban otra cosa). Judas y Silas fueron escogidos porque eran “varones principales entre los hermanos” (Hechos 15:22), o sea, hombres líderes entre los hermanos.

1Co 16:15 Hermanos, ya sabéis que la familia de Estéfanas es las primicias de Acaya, y que ellos se han dedicado al servicio de los santos. 16 Os ruego que os sujetéis a personas como ellos, y a todos los que ayudan y trabajan.

1Ped 5:5 Igualmente, jóvenes, estad sujetos a los ancianos; y todos, sumisos unos a otros, revestíos de humildad; porque: Dios resiste a los soberbios, Y da gracia a los humildes.

Heb 13:17 Obedeced a vuestros pastores, y sujetaos a ellos; porque ellos velan por vuestras almas, como quienes han de dar cuenta; para que lo hagan con alegría, y no quejándose, porque esto no os es provechoso.

Pero a fin de cuentas, lo que se aparece muy claro, es (1) hay personas adentro de la iglesia quienes gobiernan la iglesia (bien, mediocre, o mal), pero estas personas ocupan un ministerio y trabajo que es espiritual, ordenado por Dios, y están totalmente adentro de su derecho y lo que es bíblico cuando gobiernan. (2) Estas personas son encargados espiritualmente con el cuidado espiritual de la grey de Dios, y tanto que ellos tienen deberes relacionados con esta supervisión, los miembros normales de una iglesia tienen obligaciones de sujetarse a estas personas. El cristiano que rehúsa de obedecer a su pastor (anciano u obispo) es desobediente, y es inválido de atacar el oficio de supervisión para que no tenga necesidad de sujetarse. Es como decir que el gobierno civil de mi país es malo, entonces no tengo que sujetarme a ningún gobierno. Dios nos manda a sujetarnos a las autoridades que existen porque esta es la orden de Dios.

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Un comentario en “La Existencia Bíblica de Pastores

  1. Esther de Viquez

    Dios les bendiga esta muy bueno todo lo relacionado a los diferentes ministerios dentro de la iglesia y fuera de ella

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